No hay noticias del hombre que desapareció en Alto Pencoso
Este miércoles se formalizó la denuncia del paradero para que la Justicia comience a arbitrar medidas para encontrar a Osvaldo Maldonado. La última vez que se comunicó fue para avisar que querían detenerlo en un campo.
Los abogados Andrés Fernández y Guillermo Pagano llevaron el caso a la Justicia. Osvaldo Maldonado es un trabajador de Inclusión Social que lleva cinco días desaparecido. Tiene 42 años, es oriundo de la capital puntana y por cuestiones laborales residía en un ranchito cerca de Alto Pencoso. En el medio hay una acusación por violencia familiar y sospechas hacia el personal policial de la zona.
Los inconvenientes comenzaron a partir de una denuncia que realizó la ex pareja de Maldonado y por la cual le dictaron una orden de restricción.
Dos días después Fernández recibió un mensaje que hizo encender la alarma.
Maldonado se comunicó con él (este lunes 21 de septiembre) para decirle que lo querían detener (y le dio el nombre de la persona que lo “perseguía” mientras él estaba en un campo). Eso fue lo último que se supo de él. “Estamos en las horas en las que él se encuentra perdido o con miedo al personal policial de la zona. Está en materia de investigación”, indicó Fernández.
El letrado reveló un antecedente: “Maldonado había denunciado a toda la guardia policial, con nombres específicos, y hubo hostigamiento contra él y con otras personas del pueblo”. También expuso que se presentó una nota en Asuntos Internos para que dos policías sean removidos de la comisaría de la localidad.
Los letrados piensan que la desaparición tiene que ver con ese conflicto, y por eso ayer presentaron un habeas corpus en el Juzgado N° 3 que está a cargo de la jueza Virginia Palacios.
Lo que preocupa a los abogados es que Maldonado siempre cumplió con su deber y ahora está faltando; de hecho todos los días hacía 20 kilómetros caminando para hasta el Arco de Desaguadero donde cumplía sus tareas.
La Policía allanó la pieza que alquilaba Maldonado cuando él no se encontraba; fue el pasado 18 de septiembre. Allí compartía habitación con otros compañeros. La edificación es precaria y está ubicada a un costado de la Autopista de las Serranías Puntanas.
“Fueron las otras personas quienes me avisaron del procedimiento. Luego confirmé que el Juzgado de Familia había ordenado la detención, cuando según el Código de Procedimiento la detención la tiene que ordenar un juez de instrucción o penal”, dijo Fernández.
Expuso que Maldonado “nunca tuvo la posibilidad de ejercer su derecho de defensa constitucional”, cuando fue denunciado. Tampoco fue notificado que había una orden que impedía el acercamiento con su ex.
“Es muy confuso y hasta surge la preocupación de que sea una desaparición como la de Ortiz en Villa Mercedes, donde ya pasaron 6 años y el pueblo no ha tenido ninguna respuesta”, dijo por su parte Pagano.
Maldonado mide aproximadamente 1,60 y la última vez que los compañeros lo vieron vestía ropa de trabajo (color naranja).